''ODA A LA CIGARRA" - Anacreonte - & "LA CIGARRA Y LA HORMIGA" - Esopo -

Los poemas que voy a publicar, los conocéreis de haberlo leído o de alguien que te lo ha contado cuando eras pequeño/a. Porque es una fábula que todos o la mayoría conocemos. 

Oda a la cigarra. (Anacreonte).

¡Cuán feliz eres, cigarra,

Cuando en la cima de los árboles,

Ahíta después de beber una gota de rocío, te

Duermes como una reina! 

Cuanto te rodea es tuyo,

Y cuanto produce el bosque. Eres

Amada de los campesinos,

Pues no causas perjuicio en sus campos; 

Los mortales te honran,

Saludando en ti a la amable mensajera del verano. 

Las musas te aman, y también

El propio Apolo, que te dio una voz armoniosa.

La vejez no puede alcanzarte, hábil hija de la tierra, tú

Que sólo amas el canto,

Tú que no conoces el sufrimiento,

Tú que no tienes ni sangre ni carne y que casi te

Pareces a los dioses. 

La cigarra y la hormiga (Esopo).

El sol del verano ardía sobre el campo. La cigarra cantaba a toda voz en las largas horas de la siesta, tranquilamente sentada en una rama.

Comía cuando se le antojaba y no tenía preocupaciones.

Entretanto, allá abajo, las hormigas trabajaban llevando la carga de alimentos al hormiguero.

Terminó el verano, quedaron desnudos los árboles y el viento comenzó a soplar con fuerza. La cigarra sintió frío y hambre. No tenía para comer y se helaba. Entonces fue a pedir auxilio a sus vecinas, las hormigas. Llamó a la puerta del abrigado hormiguero y una hormiga acudió. La cigarra le pidió comida.

En el primer poema  se están refiriendo a la cigarra y en el segundo texto podemos ver las diferencias entre la vida de la cigarra y la vida de la hormiga.

La cigarra nos simboliza todo aquello que está relacionado con la despreocupación, la vitalidad, es decir, disfruta de la vida misma, como a todo el mundo nos gusta estar. 

Pero sin embargo, la hormiga representa el símbolo del trabajo y el esfuerzo día tras día.

El texto de Anacreonte está escrito en verso y utliza recursos literarios y el texto de Esopo es un cuento narrado.

Desde mi punto de vista, podría decir que me siento identificada de las dos. 

Cuando los alumnos estamos en el instituto, tenemos una rutina, unos trabajos, un esfuerzo que debemos que hacer para tener más cultura y en un futuro tener un trabajo, 

Pero si te tomas el instituto con el "papel" de la cigarra, en un futuro, como en el cuento se refiere, se arrepente de no haber trabajado nada y se encuentra desesperada sin comida. 

Por otro lado, me siento identificada con la cigarra cuando tenemos vacaciones. 

En las vacaciones, automáticamente desconectamos, y pasamos a una rutina de no hacer nada, tomar el sol cuando es verano, dormir... Realmente a todo el mundo le gusta eso, pero llega un momento en que te planteas que necesitas hacer algo productivo con tu vida. 

Si viviésemos toda la vida sin hacer nada no sería vida.